EL EDIFICIO EN SU EPOCA

 

      

       Cuando hablamos de la arquitectura relacionada con su tiempo, no solo tenemos en cuenta el tiempo, sino también su situación.

Uno de los ejemplos más claros y más cercanos los encontramos en Montjuic.

 

Tal como subimos por la avenida Maria Cristina nos encontramos de frente un inmenso palacio fruto de una arquitectura de estilo novecentista, propio de las construcciones conmemorativas de la época. Este hecho no nos sorprende hasta que, llegando a la plaza de la fuente, y al mirar a nuestra derecha y como intersección entre el plano de suelo y el gran muro de los pabellones de Puig i Cadafalch, encontramos una pequeña edificación, que parece desvanecerse el la lejanía por su horizontalidad y transparencia. Algo que incluso hoy en día nos sorprende por su extrema complejidad expresada de la manera más simple.

 

Mirando al pasado, 1929, nos preguntamos que impacto debió causar un edificio como este, en el conjunto de la sociedad española de la época, donde lo más común era apreciar edificios monumentalistas como el palacio. Y como decíamos anteriormente la arquitectura no se entiende sin su contexto y su tiempo.

 

Entendemos que el pabellón alemán es obra de un arquitecto Germano, Mies Van der Rohe, que llevaba ciertos años evolucionando un tipo de arquitectura desligada de todo estilo pasado y donde la experimentación conceptual y espacial junto con las nuevas técnicas y materiales, definían un nuevo tipo de entender el espacio vivido y construido.

Los aspectos fundamentales de esta obra son la liberación del espacio interior, fruto de la disociación entre estructura y cerramiento, que crean a la vez una serie de intersecciones y transparencias.

 

Pero esta arquitectura llamada racionalista, llegaría a España de la mano del GATPAC, grupo de jóvenes arquitectos, que teniendo como referencia clara a Le Corbusier, introdujeron este movimiento.

 

Pero hasta que eso ocurriera la arquitectura española estaba más centrada en conseguir un aspecto formal, basado en estilos pasados que en el resultado del espacio, es decir una arquitectura que trabajaba sobre la forma y la composición de la fachada y no con el espacio interior. Lo podemos apreciar con la simetría, la robustez de los muros, y monumentalidad de su fachada.

 

 

Interior Pabellon Alemán

 

Interior Palacio Nacional.