LA ARQUITECTURA ACTUAL
Sant Elia y Marinetti en su tratado de Arquitectura futurista, 1914 explican que la arquitectura futurista no puede basarse en una tradición, que no puede ser una copia de los estilo de épocas pasadas, y que tiene que adaptarse a los materiales propios de cada época, evolucionando el sistema constructivo y estilístico a la par que avanza el conocimiento. Proponen que una arquitectura futurista estará exenta de todo tipo de ornamentación, y que será simple y funcional.
En la actualidad los edificios recientemente más representativos de cada ciudad y de arquitectos más conocidos han sabido adaptarse a diferentes técnicas constructivas, muy ligeras y aprovechando al máximo las cualidades de los materiales que disponemos, pero la mayoría pasan a ser edificios poco funcionales y con formas de lo mas extrañas.
En estos casos, no se ha seguido con la tradición ornamental, se ha pasado a un estilo totalmente evolucionado, pero por el contrario, no han conseguido llegar a la esencia que Marinetti y Sant Elias proclamaban: no se busca la simplicidad ni la funcionalidad , sino crear del propio edificio una escultura que consiga llamar la atención y el máximo de miradas. Podríamos decir entonces que esta arquitectura esta totalmente ligada al arte, todo lo contrario que proclamaba el tratado: Funcionalidad y Simplicidad.
"La arquitectura siempre es la expresión espacial de una época. Hasta que no se reconozca con claridad esta sencilla verdad no podrá dirigirse con acierto y eficacia la lucha por los fundamentos de una nueva arquitectura."
Mies lanza esta premisa como base de su razonamiento en los años 20, pero si la traemos a nuestros tiempos, ¿Cuál es la voluntad de nuestra época?
A margen de la arquitectura de autor, que actúa al servicio de ciertos poderes económicos y que se aleja sustancialmente de los razonamientos de Mies. ¿Cuál es la preocupación y reto principal actualmente?
La respuesta para nosotros es evidente, la vivienda.
"Es un esfuerzo vano intentar que el contenido y las formas de épocas arquitectónicas anteriores sean útiles para nuestro tiempo."
En estos tiempos el llamado núcleo familiar ha evolucionado mucho, la familia tradicional como concepto único ha dejado paso a un amplio abanico de tipos familiares (aparte de la tradicional); monoparentales, parejas sin hijos... y por descontado otros tipos de convivencia.
Con lo cual estos cambios han pasado a ser una de las preocupaciones de la arquitectura, una de las principales necesidades a cubrir.
"Se han de satisfacer las actuales exigencias de objetividad y funcionalidad."
Donde más podemos apreciar este cambio de paradigma es en las viviendas de protección oficial, en las cuales la economía (tanto de espacios como monetaria) y la funcionalidad son premisas base para una buena resolución de las mismas.
Premio a la construcción momentánea
"La elección de los sacos rellenos de escombros mezclados con tierra se debe, como hemos señalado, a diversos motivos de distinta naturaleza. Por un lado está la cuestión económica y logística de la falta de materias primas en el país, así como la escasez de infraestructuras, lo que dificulta la búsqueda y el traslado de las mismas; también se ha tenido en cuenta el hecho de diseñar un refugio que puedan construir sus futuros inquilinos con unas sencillas indicaciones previas sin necesidad de recurrir a mano de obra especializada, por otro lado difícil de encontrar en el país. Asimismo deberán ser de fácil reparación; y por último está el factor psicológico de construir una nueva vivienda con los restos de la antigua."
¿CUÁL ES LA VOLUNTAD DE NUESTRA ÉPOCA?...
La arquitectura del dinero
Vivimos en un mundo que cada vez más se decanta por lo colectivo, una sociedad en la que nuestras necesidades se alivian con la economía, donde los intereses de la mayoría prevalecen sobre los de unos pocos, en definitiva vivimos en un mundo más grande y globalizado que aparta la individualidad para crear algo más grande e importante.
Y dentro de este mundo que hemos creado surgen las empresas: organizaciones que cubren nuestras necesidades de bienes y servicios, desde las cadenas de restaurantes, pasando por las aseguradoras, los bancos, nuestro propio gobierno..., todo son empresas. Quizás no sea la solución utópica pero sin duda es la que hemos perseguido y la que hemos dejado
prosperar.
Pues bien, si parece ser que este es el camino que hemos emprendido, el camino que favorecemos día a día, ¿no sería lógico que la arquitectura se orientase a satisfacer esta nueva realidad? ¿Que los recursos y los progresos tecnológicos miraran hacia este lado? Probablemente, desde el punto de vista académico, no sea lo ideal. Muchos pensarán que esa no es la esencia de la arquitectura, que no ha de rendirse a servir a la economía, que no ha de perder al individuo de vista, pero lo cierto es que eso es justo lo que hacemos: nos hemos acomodado en el capitalismo, tomamos nuestras decisiones sobre la base de ello, nos perdemos de vista a nosotros como individuos para servir a un colectivo. Es posible que no queramos creer que somos así, pero somos así. Pues de la misma manera la arquitectura es esencialmente un producto que responde a una demanda y, si estamos viviendo en un mundo dedicado a lo global, a lo económico, a lo colectivo, nuestra arquitectura debe satisfacer esta demanda.
Francisco Truyols
DESNUDEMOS LA ARQUITECTURA. SAQUEMOS SU ESENCIA.
“Un buen día dejé de trabajar y procuré pensar libremente en lo que hacía y se hacía. Ese mismo día empezaron a desprenderse tantos añadidos que a cualquier pensamiento serio sobre arquitectura se abrazaban, se pegaban como auténticas lapas,
crustáceos que antes eran habituales, imperceptibles.El resultado limpio era atractivo y pensé que también podía llamarse Arquitectura, tal vez arquitectura, y disfruté con esa a minúscula, ya que me bastaba para resolver los problemas que siempre la arquitectura tuvo que resolver: ordenación del mundo en dondedesarrollamos nuestra vida.”
