Teglvaerkshavnen Housing.

Copenhague, Dinamarca


La idea básica del proyecto residía en que el dinero por la no necesidad de comprar suelo (el desarrollo se produce en espacio ganado al mar y donado por las autoridades portuarias) podría devolverse a cambio de un gran espacio que acomodaría edificios y vehículos. Se trataba de construir una isla artificial en la forma de un edificio con aparcamiento para así deshacerse de los coches que molestan entre los espacios habitables entre cases y, de esta manera acercarse todavía mas al agua.

La visión del mar se ha convertido en una obsesión para las Real Estate, pero tal vez mirar el mar es lo menos interesante y seguramente el modo más pasivo de disfrutar cerca del agua.
La reclamación del equipo de arquitectos de Tegnestuen Vandkunsten consistía en que los espacios entre las casas y la cubiertas de madera de alrededor de la isla de aparcamientos debían animar a nadar, pescar, practicar kayaking, etc.; y el gran acierto ha consistido en que cuando los primeros residentes se mudaron, espontáneamente comenzaron a pescar desde sus balcones, practicar la natación o simplemente divertirse en la plataforma flotante…

Construir sobre el agua es un desafío, pero una vez establecida la isla artificial, el desarrollo del proyecto ayuda a ordenar los tiempos. Los edificios son muy estrechos y todos los pisos reciben luz del día en dos o tres de las fachadas. Las ventanas van desde el suelo hasta el techo y en su mayor parte se han colocado junto a paredes de partición para asi reflejar la limitada luz nórdica hacia los interiores de las viviendas y sacar el mayor partido de la luz reflejada del agua. Todos los pisos tienen dos balcones privados con pantallas movibles que proporcionan privacidad.
La estructura se ha realizado mediante placas de hormigón prefabricado, pero debido a las dificultades y particularidades del emplazamiento, elementos como balcones, escaleras y los cuartos de baño se han prefabricado fuera y colocado directamente en el edificio mediante grúas.